Islandia. Actualización sobre la actividad sísmica en Reykjanes

Las autoridades de Protección Civil en Islandia han reducido el nivel de alerta de la actividad sísmica en la península de Reykjanes de «estado de emergencia» a «estado de alerta».

Esta decisión se tomó después de que la Oficina Meteorológica de Islandia evaluara que la probabilidad de una erupción súbita en la ciudad de Grindavík ha disminuido de manera constante cada día, y ahora se considera un riesgo bajo.

Aunque la posibilidad de una erupción volcánica en el área sobre el túnel de magma, probablemente entre Hagafell y Sýlingarfell, aún existe, también es posible que el magma regrese al túnel bajo Grindavík. Sin embargo, esto se detectará rápidamente a través de sensores sísmicos y GPS.

El Servicio de Protección y Gestión de Emergencias (CPEM) ha informado que la zona sigue siendo objeto de una vigilancia rigurosa y aún se considera peligrosa.

El Gobierno de Islandia continúa supervisando la situación en colaboración con el Departamento de Protección Civil y Gestión de Emergencias, la Oficina Meteorológica de Islandia, las autoridades locales y socios de la industria de viajes y turismo.

Hasta el momento, no ha habido interrupciones en los vuelos hacia y desde Islandia, y los corredores de vuelos internacionales permanecen abiertos. Además, todas las rutas al aeropuerto de Keflavík, incluida la Reykjanesbraut, están funcionando con normalidad y tienen buen acceso.


Iceland. Reykjanes seismic activity update

Civil Protection authorities in Iceland have reduced the alert level of seismic activity on the Reykjanes peninsula from «state of emergency» to «state of alert».

This decision was taken after the Icelandic Meteorological Office assessed that the probability of a sudden eruption in the town of Grindavík has steadily decreased each day, and is now considered a low risk.

Although the possibility of a volcanic eruption in the area above the magma tunnel, probably between Hagafell and Sýlingarfell, still exists, it is also possible that magma will flow back into the tunnel under Grindavík. However, this will be detected quickly through seismic sensors and GPS.

The Protection and Emergency Management Service (CPEM) has reported that the area remains under close surveillance and is still considered dangerous.

The Icelandic government continues to monitor the situation in collaboration with the Department of Civil Protection and Emergency Management, the Icelandic Meteorological Office, local authorities and partners from the travel and tourism industry.

So far, there have been no disruptions to flights to and from Iceland, and international flight corridors remain open. In addition, all routes to Keflavík airport, including Reykjanesbraut, are operating normally and have good access.